PUENTE DEL CONJURADERO SOBRE EL RÍO CAMESA
Villaescusa de las Torres-Palencia
Villaescusa de las Torres-Palencia
FFCC Alar del Rey-Santander PK 391,500
N-611 PK 103 y PP-6202 PK 0
N-611 PK 103 y PP-6202 PK 0
Bueno, aunque no lo parezca e
incluso entre en la categoría de adefesios, este puente bautizado con nombre
inquietante, sigue siendo un puente y además, bastante útil. Puede que, entre
los cientos de obras pontoneras que he fotografiado a lo largo del tiempo, sea
el más cutre e inapropiado pero merece estar en la galería aunque sólo sea para
aportarnos una gráfica lección de lo que no debería de hacerse con
infraestructuras antiguas; hay que tener en cuenta que, cuando se acomete la
gran reforma de este puente, independientemente de que fuera necesario por el
progreso en el mundo del ferrocarril, esta estructura ya tenía un siglo.
Seguramente, en la actualidad, se habría acometido su modernización de un modo
más respetuoso con el viejo proyecto.
Antecedentes: Pertenece a la
legendaria línea 160 -actualmente Madrid/Palencia/Santander- diseñada como camino de
hierro que a lo largo de 217 kilómetros comunicaba la meseta norte castellana con
la costa cántabra. El proyecto original es del ingeniero Juan Rafo que lo realizó
en 1845 aunque la extrema dificultad del trazado, especialmente por el Alto
Campoo, Reinosa y las depresiones del río Besaya obligaron a los proyectistas a
diversas modificaciones y a dividir el tramo Alar-Santander en tres sub-tramos
bien diferenciados. También influyeron los aspectos puramente económicos pues
la empresa explotadora de estos raíles paso de ser un pequeño conglomerado de
hacendados locales que ganaron la concesión gubernamental de 1849 a
constituirse como Compañía de Ferrocarriles de Isabel II en 1855,
posteriormente Nueva Compañía del Ferrocarril de Alar-Santander (en el momento
en que este tramo entró en funcionamiento) y, finalmente se integraron en la
potente Ferrocarriles del Norte o "La Norte" como se la conocía
popularmente. Desde 1941 se nacionalizó como Renfe y desde 2004 es
administrada por Adif. Se trata de una de las primeras líneas férreas
peninsulares y la primera del Cantábrico.
Respecto a nuestro puente, se
encuentra en el primer sub-tramo del proyecto, esto es, la conexión entre Alar
del Rey en Palencia con Reinosa en Cantabria que pretendía unir el tránsito de
mercancías, especialmente cereales a granel o harina, que llegaban en barcazas a
las dársenas del Canal de Castilla en la localidad palentina para hacer el
trasbordo a los nuevos convoyes camino de Santander y su activo puerto hacia
ultramar. En este sector se respetó bastante el proyecto de Rafo aunque sufrió
alguna modificación por parte de la empresa constructora inglesa y de su
ingeniero Alfred S. Jee; entre otros, también intervino en la obra el ingeniero
español Carlos Campuzano. Este tramo se inauguró en marzo de 1857 en ancho
ibérico de 1.668 milímetros con llegada a Reinosa donde hacían trasbordo a diligencias los viajeros hasta
llegar al inicio del tercer sub-tramo por Corrales de Buelna y seguir en tren
hasta la capital cántabra pues este último sector empezó a funcionar en 1858.
En el sector Alar del Rey-Reinosa
las mayores dificultades se encontraban en el Valle de Aguilar, La Horadada y
otros cañones angostos junto al río Pisuerga, el piedemonte rocoso en la zona
de Villaescusa de las Torres, junto al río Camesa y por último, la depresión de las arroyadas en la cabecera del río Ebro cuyo desnivel salva el famoso Viaducto de Celada,
enteramente de fábrica y con 10 bellos arcos sobre la vaguada del Arroyo de Marlantes. También aparece más información histórica de esta línea en la entrada para este blog del Pontón de Quintanilla de las Torres o en el Puente ferroviario de Santa Olalla. Recientemente, subí al blog el primer puente de esta línea en el pueblo de Alar del Rey obra semejante a ésta en lo concerniente a su bóveda rebajada y donde amplio la información de todo el trayecto de la misma.
Es de destacar la presencia en la
obra entre los años 1852 y 1858 del joven ingeniero inglés William Atkinson
que, además de las labores propias de su cargo, ejerció como innovador
fotógrafo. Se llegaron a recopilar 86 instantáneas, la mayoría datadas en marzo
de 1857, muchas de ellas de la propia ejecución de la obra -hecho en sí mismo
muy novedoso en la obra civil que hasta entonces se realizaba en España- y
otras muchas para dar protagonismo al personal técnico y a diferentes
especialistas y obreros que trabajaban en ella además de otras de cariz
etnológico o monumental que iba tomando desde su punto de residencia en un
hotel de Reinosa. Esta colección debidamente encuadernada se obsequió por la
propia compañía férrea a la reina Isabel II probablemente cuando se inauguró la
línea el año de 1.866 en Santander,
donde estuvo presente el rey consorte Francisco de Asís. Actualmente se
encuentran en la Colección de Patrimonio Nacional en el Palacio Real de Madrid.
Nuestro puente en cuestión cruza
el río Camesa junto a la localidad de Villaescusa de las Torres, en Palencia y
se debió construir entre los años 1852 y 1855. Constaba de 5 vanos. Los cuatro adintelados
semejantes, flanqueados por 4 enormes pilas de cantos redondeados a ambas
aguas que hacen de tajamares-espolones , con sillares de piedra caliza bien trabajada y almohadillados y un
estrecho sombrerete de coronación hasta rasante; en margen derecha y como
continuación del estribo, un bello arco rebajado con soberbio terminado de
boquillas que aún subsiste (clave sobresaliente y algunas dovelas pentagonales
para asentar las estrechas hiladas de piedra sucesivamente que en el arte de montea se llama a montacaballo). Sobre pilas, desde
el túnel y hasta el citado arco se instaló una estructura de vigamen de hierro
forjado en celosía con un tupido entrelazo de pequeñas cruces de San Andrés del tipo
estandarizado y utilizado en variados puentes a lo largo de esta línea férrea cuya tipología es celosía Town, patente del año 1820 que se utilizó mucho en madera en los ferrocarriles americanos.
Según la revista Obras Públicas, tomo XXII, número 9 editada en Madrid el 01.05.1874
donde se cita brevemente la obra pontonera, constaba de tres cuerpos de celosía
debidamente unidos que daban una longitud total al tablero de 50 metros. Amplio
túmulo o aterramiento en cabecera de margen derecha y buena obra de fábrica en estribos
del mismo material calizo; sobre pilas y a modo de armazón de la celosía en
ambas caras, cubos semicilíndricos de piedra. No olvido destacar que, tanto en éste como en otros puentes de la línea, la longitud de pilas parece excesiva con respecto a su tablero pero hay que tener en cuenta que el proyecto original contemplaba la construcción de dos vías paralelas.
Situación actual: Se han rebajado
las luces de los vanos, incluido el de arco y se han reafirmado las viejas
pilas a las que se han añadido otras tres más de hormigón armado. La celosía de hierro
se debió sustituir por un tablero corriente de largueros de hormigón armado -vigas de sección en T- en
alguna reforma hacia los años 60 del pasado siglo al tiempo que se reponían
nuevos raíles. En el canto del tablero (aguas abajo) corre el vial de inspección
de peones, renovado recientemente con rejilla de acero galvanizado y como
pretiles, unas viejas barandillas de hierro repintadas. El espesor en el canto de
las vigas del tablero han influido en que el vano de la margen izquierda junto
al túnel (ahora dividido en dos por la nueva pila) haya quedado angosto y muy
bajo, con gálibos aproximado de 2,00 y
1,85 metros pero que permiten dar salida a un camino que lleva a varias fincas
del entorno. Lo cierto es que con esta reforma, la longitud del puente hasta
estribos es actualmente de 90 metros según medición reciente realizada in situ. Todavía, a día de hoy, se sigue trabajando en la modernización de la
vía con cambio de catenaria, traviesas o rejillas de contención para evitar la
caída de balasto, por citar unas pocas modificaciones.
La conclusión final sobre esta
obra es que debemos respetar las infraestructuras antiguas y que si están
obsoletas, siempre será mejor y más económico reformarlas o reestructurarlas
antes que destruirlas y hacer otras nuevas; no obstante, tanto en el caso de
este puente como en otros muchos de líneas férreas y carreteras, las
actuaciones ingenieriles para seguir manteniendo la antigua estructura han
barrido por completo la esbeltez y belleza de la obra y los elementos
incorporados, no sólo no aportan nada (estéticamente) sino que envilecen la
vieja obra pontonera. En la famosa línea 160 del ferrocarril de Alar del Rey-Santander,
sembrado de bellísimos puentes de celosía metálica, quizás el parangón de nuestra
incipiente y modesta revolución industrial, ha pasado un huracán incomprensible
que acabó con esas muestras de ingeniería del hierro forjado o laminado
(incluso del acero), construyendo en su lugar una sería de puentes impersonales
y bastante feos; cuestión del falaz y controvertido desarrollismo de los años
60 del pasado siglo, seguro. Respecto a su mantenimiento, se aprecia una intervención en la bóveda de fábrica para el rejuntado del dovelaje y poco más; abundan los matojos y hierbas que medran en las juntas de la sillería de pilas e incluso crecen con gran libertad algunos chopos en las mismas, erosionando la sillería que acabará desprendiéndose si no se pone remedio.
Acceso: Se encuentra en la órbita
de la carretera nacional N-611 (Palencia-Santander) y de la autovía A-67.
Pasado el PK 103 de la nacional coger desvío a Valoria de Aguilar y seguir por
la local PP-6202 un par de kilómetros hasta llegar a Villaescusa de las Torres.
Antes de entrar en el pueblo, tomar a la izquierda una vía de tierra que nos
llevará al río Camesa donde se encuentra este puente y una moderna y bella
pasarela de madera con arcos parabólicos.
Tomas de William Atkinson probablemente realizadas en 1857. En recuadro amarillo, visión del puente desde aguas abajo donde el río Camesa desemboca en el río Pisuerga.
Tanda de fotos de fecha 20.04.2014
Tanda de fotos de fecha 19.08.2014
Tanda de fotos de fecha 14.06.2015
FAUNA Y FLORA JUNTO AL PUENTE
Campanilla de cantil (Campanula rotundifolia subsp. hispanica. Campanulaceae). Tomas de fecha 14.06.2015.
Chinche púdica (Carpocoris pudicus) sobre campanillas. Toma de fecha 14.06.2015.
Nenúfar amarillo o Maravilla de río (Nuphar luteum (L.) Sm. subsp. luteum. Nyphaeaceae). En la última foto presencia de una Rana común (Pelophilax perezi). Tomas de fecha 14.06.2015.
Lechuga de caballo, Buglosa o Cinco lenguas (Pentaglottis sempervirens (L.) Tausch. Boraginaceae). Tomas de fecha 20.04.2014.
Pero el puente de la entrada a Villaescusa de las Torres para cuando pues lleva más de dos años y seguimos igual que 20 del 12 de 2020 da vergüenza verlo como esta un saludo
ResponderEliminarSí, desconocido/a, el asunto es lamentable. Parece que el proyecto está aprobado pero me imagino que faltarán fondos en la Diputación o quizás, controversias con la CHD para su ejecución. Este cutre pero práctico puente al que aludes también tiene su entrada en este blog, donde deberías de haber escrito tu queja:
ResponderEliminarhttp://loboquirce.blogspot.com/2021/06/puente-de-villaescusa-de-las-torres.html
Saludos cordiales.