LA POLA DE GORDÓN. León
N-630 PK 112,352
Puede que sean reliquias de
aquel proyecto carreteril para el Camino Real de Asturias, que como ya se
indicó en la entrada para el Puente del Tornero o en el de La Estación, ambos en
La Pola de Gordón, pudiera tener origen hacia el año 1769 cuando se decide el
trayecto por Pajares y lentamente se va construyendo el nuevo camino hasta el
año 1830 en que parece ser, se da por concluido. Lo cierto es que de un
proyecto inicial clasicista se va pasando o retocando este vial hasta época
decimonónica, quizás elevando la cota de la calzada para evitar inundaciones
del Bernesga en época de fuertes crecidas. Como se observa, ambos pontones
están muy elevados para evitar precisamente encharcamiento o anegaciones de
lodos. Otra reliquia de este viejo camino sería el ahora arruinado Puente de Vega de Gordón.
Aunque bien ejecutados,
entiendo que el predominio de la mampostería en la fábrica, sensiblemente más
económico que la sillería de buena labra, me hace pensar que estas estructuras
se realizaron o se modificaron en el último tercio del siglo XIX. Incluso en el
pontón de la zona deportiva tiene anejo a su muro de contención, restos de lo
que pudo ser otro anterior, a menor cota sobre la rasante de la actual calzada.
No se trata de obras civiles
de categoría o monumentalidad pero sí hay que advertir que son vestigios del
buen hacer en la ingeniería carreteril de época, tanto es así, que pese a sus
drásticas modificaciones en los años 60 del siglo XX, se ha querido perpetuar
su impronta más o menos original. Aunque la calzada se ha ensanchado y por lo
tanto se han alargado las bóvedas con hormigón, incluso incluyendo losas de
hormigón armado bajo el asfalto, se ha efectuado un corrimiento de muros,
placando la cara vista del lado de aguas arriba de estas escorrentías con la
misma piedra original, incluyendo claro está, nuevas piezas para rematar la
obra. Esta peculiaridad hace que todavía nos podamos fijar en estas obras
civiles porque presentan cierta pátina de vetustez. El tiempo ha difuminado con
líquenes y manchas las boquillas de estas obras de hormigón mimetizando la
actuación pero lo más espectacular son los fuertes muros de contención con
aletas oblicuas y de tipo baluarte que, como decía, pese a chaparse con
mampuestos grandes de caliza, su disposición es cuidada y de cierta calidad,
cualidad más evidente en el lado de aguas abajo.
En el pontón de la zona
deportiva y en su cara norte se ha alargado el muro utilizando mampuestos y
sillarejo de esquisto que le da un aspecto más negruzco. Creo que el arquillo
lateral es obra relacionada con el ensanchamiento de la calzada para utilizarlo
como desagüe de algún regato y como vierteaguas de la propia calzada cuyo
destino, ya canalizado, es el río Bernesga. Este pontón daba servicio también a
un viejo camino carretero hacia la zona más montañosa y puede que llegara hasta
Santa Lucia de Gordón antes de que se realizara el camino real. Ahora toma el
nombre de calle de Joaquín Blume y se accede a una amplia zona deportiva y más
adelante, como calzada vecinal, al pozo minero de Emilio del Valle
perteneciente a Hullera Vasco Leonesa.
Los diferentes recrecidos y
las biondas impiden ver lo que queda de los viejos pretiles de mampostería.
Respecto al otro pontón que da servicio a un camino desde el pueblo hacia el cementerio cabe decir lo mismo. Es una amplia obra carreteril con un largo aterramiento a ambos lados chapado en mampostería y sillería poco tratada en cara vista pero voluminosa que le da a la obra cierto carácter de fortificación. Al estar en una zona abrupta se han incorporado escalinatas para el acceso al cementerio y parece que se ha intentado embellecer la zona con arbolado y setos. En este caso y desde la calzada tampoco se observan los pretiles de mampostería que se encuentran completos en aguas abajo, poco visibles en parte debido a los 3 o 4 recrecidos asfálticos en el firme.
Tomas del tablero en fecha 12.09.2018
PONTÓN DEL CEMENTERIO. N-630 PK 111,150
Toma de fecha 08.05.2012
Dos tomas de fecha 02.09.2014
Tanda de fotos de fecha 21.07.2021
En los jardincillos de este último pontón crecía solitaria esta mata de Gordolobo, también llamado Patalobo o Berza de burro (Verbascum pulverulentum Vill. Scrophulariaceae).
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