PUENTE DE AZARQUIEL SOBRE EL RÍO TAJO
TOLEDO
N-400 PK 0
Está
considerado el sexto puente que se construye en la ciudad de Toledo (ahora hay
ocho) y se debió de erigir a principios de la década de los años 80 del siglo
XX, muy probablemente en el mismo año 1980. En fecha 10.11.1983 se debatía en
la Real Academia de las Artes de Toledo la conveniencia de bautizar la
estructura como Puente de Azarquiel, en memoria del artesano, astrónomo e
investigador así llamado y que vivió en esta ciudad hacia el año 1085.
Con su
construcción se trataba de enlazar el barrio de Santa Bárbara con la calle
Carreras, una de las principales vías de entrada a la ciudad en el entorno de
la Puerta de la Bisagra así como conseguir mayor fluidez en la salida hacia
Madrid por el nudo norte. También observo que es un buen itinerario para
acceder a la estación de ferrocarril. Lo cierto es que desde él se puede
contemplar con gran nitidez la joya pontonera que representa el Puente de Alcántara.
Características
actuales de la obra: Trasteando por el
tablero del viejo puente de Alcántara, embelesado con sus viejos pretiles
machihembrados a duro golpe de maza, acariciando las ancestrales piedras, su
firme enlosado, en fin, la obra plena e inigualable, miraba de tanto en tanto
hacia aguas arriba y en la amplia terraza fluvial que ha conformado el propio
cauce, se encuentra -que no destaca- una modesta obra, firme, escueta, lineal y
armoniosa que atiende al nombre de Puente de Azarquiel. Obra reciente pero
olvidada por los vigilantes patrimoniales de la ciudad, los poderes municipales
y hasta la propia prensa pues no consigo cazar información fidedigna de su
diseño, proyecto y ejecución.
Hay una
intención clara en su proyectista de que debe hacerse una obra invisible, que
no interfiera las vistas del viejo e histórico puente de Alcántara y el típico
paisaje medieval de la ciudad que se contempla en el entorno. Debe ser una obra
civil robusta y práctica y así ha sido pues es de una eficiencia indiscutible
al dar salida a los tráficos que desde Madrid o la propia ciudad, se dirigen
hacia Cuenca y el Levante o el propio enlace con la A-42/CM-42 hacia el sur.
Es una
estructura plenamente horizontal que parece que roza la lámina de aguas, visto
desde la lejanía. Su longitud total se aproxima a los 156 metros incluyendo
zonas de estribos. El ancho es de 23 metros con calzadas de doble vía para cada
sentido de la marcha que disponen de 9 metros cada una y unas amplias aceras en
ambos lados. El tablero se apoya en ambos estribos y dos pilas intermedias de
hormigón blanco con forma artística, algo así como un diapasón o forma en U
estrechándose el hueco hasta su conjunción con el propio tablero. Dispone de 3
vanos adintelados con luces de 41+55+34 metros (desde aguas arriba); el primero
habilita una vía de tierra bajo su arco.
Vigas de
hormigón pretensado de canto muy estrecho aunque aumenta progresivamente en
zonas de pilas, a semejanza de las vigas cantilever, en varias secciones que se
fusionan formando una unidad plena. En superficie, como digo, amplias aceras de
enlosado, calzadas de hormigón asfáltico, modernos guardarruedas de acero en
tubo y petos a base de artísticas barandillas metálicas en declive hacia el
exterior.
En abril
del año 2008, según leo en la prensa, el gobierno municipal quería renovar o
reformar partes del puente, en concreto los componentes de acero -supongo que
la barandilla-, la iluminación a base de incorporar farolas de diseño y el
enlosado de viales peatonales. Parece que el presupuesto calculado era de
531.000.- euros.
La noticia
la recogía 20 Minutos y Europa-Press el
01.04.2008 con este detalle: [...] El alcalde de Toledo, Emiliano García-Page, anunció
hoy una inversión de 600.000 euros, "unos cien millones de las antiguas
pesetas" para realizar obras de remodelación en el Puente de Azarquiel,
actuaciones que contribuirán "a mejorarlo notablemente, porque a pesar de
ser de factura reciente, está muy deteriorado". Imagen, estética e
iluminación, esa es la clave. A preguntas de los medios, tras participar en una
reforestación de árboles junto con escolares toledanos, el regidor capitalino
dijo sentir "vergüenza del estado que desde hace años presenta este
puente, que está en el cogollo de miles y miles de visitantes". [...]
Por su parte, la web de la empresa constructora BECSA, encargada de la
obra, nos informa del asunto: [...] Obra de
remodelación del Puente de Azarquiel que consistieron en la renovación del
acerado, un nuevo y mejor alumbrado público y el cambio completo de la
barandilla y los guardarraíles, al objeto adecuar su entorno a la actualidad y
años futuros. La remodelación del puente se divide en tres fases, la primera de
ellas con la sustitución completa del acerado, bastante deteriorado
actualmente, desde la glorieta de Azarquiel hasta la del Hortelano, ya en el
barrio de Santa Bárbara. Otra de las fases es la renovación integral del
alumbrado público, ya que se instalarán un total de 70 nuevos puntos de luz con
la novedad de que se instalarán a ambos lados y no como en la actualidad, que
se encuentran ubicados únicamente en la mediana. Además, la nueva iluminación
llegará hasta la rotonda de Azarquiel, lo que mejorará la visibilidad para el
tráfico en esta zona. Además, se ha tenido que dar una solución técnica para
evitar en un futuro el problema de vibraciones del puente que actualmente
provoca la rotura de bombillas de las farolas. Por último, la sustitución de
los 6000n de la barandilla actual y un guardarraíl más acorde con el entorno
urbano. Año 2008. Web de BECSA, constructora.[...]
Lo curioso es que, años más tarde, a principios de 2014 los toledanos
que cruzaban el puente andando, se alarmaban de ciertos movimientos en el
firme, incluso en las propias barandillas y la prensa de la época, procedió a
facilitar información al respecto. Por ejemplo, La Tribuna de Toledo, en su
ejemplar de fecha 02.01.2014 decía: [...] Se han producido movimientos extraños en
baldosas de los viales y el desplazamiento de las barandillas, situación que
está alarmando a vecinos y paseantes aunque el Ayuntamiento ha restado
importancia al asunto. [...] Parece que la cosa se arregló más adelante
aunque no deja de ser curioso que el percance se achacara a las dilataciones
del puente, después de 34 años de trabajo. Así lo explicaba el concejal de
obras públicas: Se trata tan sólo de una dilatación de la base del
puente, que ha movido la tierra que allí hay. Pero, en principio, no tiene
mayores consecuencias. Afecta tan sólo a la zona peatonal del puente, no a la
del tráfico rodado. Y si se nota realmente el desplazamiento de la tierra,
explica el concejal de Obras, Gabriel González, es porque se ha movido el
bordillo sobre el que está anchada la barandilla y esta se ha retorcido.
«Porque si no, ni se notaría», explica el edil, «porque ahora se nota ladeada
la valla, pero no tiene mayores consecuencias... (Información de J. Monroy en el diario de 02.01.2014).
Quizás, no se quiso investigar la actuación de reforma de los firmes de viales
y cantos donde se hincaron las barandillas en 2.008 y que llevarían
incorporadas losas de hormigón o
lechadas de cemento de refuerzo sin respetar las juntas de dilatación de la
obra primitiva.
Pese
al acertado nombre que tiene el puente, hubo una corriente conservadora de
leales a la política centrista que pretendían con poca o nula originalidad
bautizar al puente con el nombre de Adolfo Suárez. Así lo recogía el ABC en su
ejemplar de fecha 26.03.2014 pues parece ser que la construcción del puente se
impulsó bajo su gobierno. Entiendo que este presidente -y cualquier otro- ya
tienen suficientes reconocimientos hasta en las obras públicas que
promocionaron.
En relación con su actual nombre, curioso por demás, en el páramo estéril de la
ciencia española, no solo la del siglo XII, reflejo este texto tomado de
la Wikipedia:
Azarquiel o Al-Zarqali (Toledo, 1029 + Sevilla, 1087) , de
nombre completo Abū Isḥāq Ibrāhīm ibn Yaḥyā al-Naqqāsh al-Zarqālī, fue un
importante astrónomo y geógrafo de Al-Ándalus. Vivió en Toledo
hasta que en 1085 la conquista castellana de la ciudad lo
llevó a emigrar a Sevilla , donde murió.
En la actualidad el cráter lunar Arzachel lleva este nombre
en memoria de Azarquiel.
Azarquiel trabajó como herrero u orfebre y
destacó por su destreza en el trabajo de los metales, elaborando instrumentos científicos de precisión, como astrolabios, probablemente a
petición de astrónomos árabes y hebreos del reino taifa de Toledo. La comunicación
con estos eruditos y la inteligencia de Al-Zarqalí pudo llevarle a una notable
comprensión de la ciencia astronómica de forma autodidacta, lo que le llevó a
crear innovaciones a partir del astrolabio, como la azafea.
Su obra la conocemos fundamentalmente a
través de las traducciones que hicieron los especialistas en astronomía
encargados de la obra científica del scriptorium real de Alfonso X. Así, entre 1225 y 1231 el también judío
toledano Yehuda ben Moshe y Guillelmus Anglicus tradujeron su Tratado de la azafea al latín , que fue vertido
en los años 1260 al castellano por
el mismo judío toledano, llamado en los prólogos de las obras alfonsíes Yehuda Mosca o Mosca el Coheneso.
Una de las más citadas contribuciones de
Azarquiel fueron la compilación de las Tablas Astronómicas de Toledo en su
versión árabe. Sin embargo, resulta paradójico que, en realidad, Azarquiel
tuviera una aportación a este respecto menos importante, ya que fue un trabajo
realizado por Al-Juarismi y Al-Battani. Según lo que se
deduce del estudio de las tablas de Toledo, Azarquiel estaba en disposición de
realizar predicciones de suma importancia dentro de la Astronomía. Las Tablas
tenían como función principal la de ofrecer a los astrónomos las posiciones en
el cielo de cierto tipo de astros y las fechas en las que tenían lugar
determinados fenómenos cósmicos (como las fases de la Luna, etc.). Por tanto,
eran empleadas para poder concretar la situación exacta de un cuerpo celeste en
épocas futuras. Azarquiel, que tenía en su poder datos precisos sobre multitud
de fenómenos gracias a la labor de sus ayudantes, pudo emplear las Tablas para
predecir los eclipses solares que sucederían años, e incluso siglos, más tarde.
La precisión de las Tablas era tal que Pierre Simon de Laplace (1749 - 1827),
uno de los más destacados matemáticos de la Ilustración, seguía utilizando las
observaciones y anotaciones de Azarquiel para realizar los cálculos de las
posiciones y predicciones planetarias.
Al parecer, también fue capaz, mediante el
análisis detallado de los datos recabados, de poder predecir la aparición de
cometas. Sobre esto hay que ser, no obstante, un tanto cautelosos, ya que no se
dispone aún de los conocimientos necesarios para poder asegurar tal extremo.
Resulta posible, a pesar de todo, que Azarquiel pudiera en efecto tener
conocimiento de algún procedimiento por el cual llegara a predecir la aparición
de un cometa. Si esto fuera cierto, Azarquiel aventajaría en casi 700 años a Edmund Halley (1656-1742), quien
comprendió que el cometa que lleva su nombre y que se había observado en 1681
era el mismo que otros astrónomos vieron en 1604, y que retornaría a las
proximidades del Sol en 1757. Halley sentó las bases para poder determinar
asimismo el año aproximado de retorno del cometa empleando unas pocas
observaciones del mismo. Pero la mayor aportación de Azarquiel a la astronomía
la constituye el desarrollo de la azafea, una variedad del astrolabio que permitía que el
observador no necesitara encontrarse en un lugar determinado para desarrollar
los cómputos astronómicos, sino que podía ser usado en cualquier latitud terrestre, lo que
le convertía en un instrumento ideal para ser usado en la navegación.
Azarquiel realizó estudios e
investigaciones en varios campos de la Astronomía. Por ejemplo, fue capaz de
encontrar cuál era el movimiento del apogeo solar (la distancia
máxima entre la Tierra y el Sol). Azarquiel pudo determinar con una gran
precisión que el punto del apogeo solar variaba en 1 grado cada 299 años,
analizando las observaciones que se disponían al respecto durante los últimos
25 años.
También tuvo Azarquiel interés en el tema
de la precisión de los equinoccios.
Escribió un trabajo sobre ello, hoy en día desaparecido, en el que describe de
qué manera podría explicarse este hecho. Como la Tierra es un astro que recibe
la influencia básica del Sol y de la Luna y, en menor medida, de los otros
planetas del Sistema Solar, su movimiento de rotación presenta una ligera
variación a lo largo del tiempo. En grandes periodos de tiempo, los polos del
planeta no se dirigen siempre al mismo sitio, sino que van modificando la
dirección a la que apuntan debido al movimiento de rotación terrestre; esto es
lo que se denomina precesión de los equinoccios. En el fondo, es como si la
Tierra se comportara como una peonza; su eje, a medida que gira, cambia
ligeramente.
Dos buenas fotos de la construcción del puente hacia el año 1983/1984 de la colección de Javier Felage que exhibe el blog Toledo Olvidado donde también hay otras más de su construcción.
Tres fotos tomadas en 2008 tras la reforma. Web de la constructora Becsa.
Foto de Amador Cuartero López. Imagen nocturna tomada el 13.12.2010
Tomas del 02.01.2014 en la Tribuna de Toledo. Fotos de David Pérez.
Imagen sin identificar tomada de Internet.
Tanda de fotos que realicé el 11.11.2016 desde la zona del Puente de Alcántara.
Fotografía de fecha 25.04.2019
Muy interesante la explicacion
ResponderEliminarHiy he dado una vuelta ovoide por ambso puentes. Vale la pena verlos el
uno dsde el otro
Me alegro que te haya gustado la explicación.
ResponderEliminarUn saludo.