miércoles, 15 de septiembre de 2021

PUENTE DE ARBAS DEL PUERTO SOBRE RÍO BERNESGA. León

 PUENTE SOBRE EL RÍO BERNESGA
TÉRMINO DE ARBAS DEL PUERTO. León
N-630 PK 89

A veces, no siempre, este lobo amante de la caminería se lleva sorpresas agradables. En este caso vengo siguiendo el itinerario del viejo camino real desde León hacia Asturias, calzada cuyo origen pudiéramos adjudicar a época barroca aun cuando existen vestigios en algunos puentes del camino que podría pertenecer a tiempos medievales. Lo cierto es que gran parte de la calzada hasta Pajares se reformó en el siglo XVIII y por lo tanto muchas estructuras pontoneras de obra nueva o rehabilitación son de tipología clasicista. Se aconseja consultar las entradas en el blog para los puentes de Vega de Gordón, El Tornero o Puente de Alba donde se aporta amplia información sobre esta vieja calzada, fuentes, bibliografía y material gráfico.

Para el caso que me ocupa siempre consulto el impagable contenido del “Catálogo de puentes de León anteriores a 1936”, obra editada en el año 1988 por el CICCP y el CEDEX-CEHOPU donde minuciosamente aparecen la mayoría de los puentes y pontones históricos de la provincia leonesa. Pero no todos, pese al gran esfuerzo realizado por los técnicos que visitaron el terreno y ejercieron una auténtica labor de arqueología de campo. En otros tratados sobre la pontonería leonesa no es que aparezca esta digna obra es que olvidan otros muchos ejemplos históricos de pasos sobre el río Bernesga y es que el cómodo estudio de gabinete tiene esas lagunas pues no se puede abarcar todo el territorio si no te esfuerzas en andar el camino por abrupto o incomodo que sea.

La pontonería sobre el río Bernesga y arroyos tributarios que han pertenecido al ancestral camino real nos depara la sorpresa del puente que ahora presento así como otros varios de los que no se tienen noticias, ni siquiera una triste fotografía que sirviera para documentarlo y observar su evolución en el tiempo tras las varias reformas que todos han sufrido al ensanchar esta calzada para adaptarla a los estándares de carretera nacional. Ya he subido varios ejemplos de obras prácticamente desconocidas como son los viejos puentes de La Faya en el término de Santa Lucía de Gordón o el de La Vid de Gordón, ahora con sencillos tableros horizontales pero que pudieron ser estructuras vetustas cuyo origen es más o menos remoto; algo parecido ocurre con el de Villamanin o el de Villanueva de la Tercia, mejor documentos pero que por su antigüedad nos hacer pensar en la utilidad de esta ruta hacia Asturias desde tiempo inmemorial. Otros puentecillos desconocidos en la historiografía pontonera son los de Arbas del Puerto, muy cerca de las fuentes nacientes del río Bernesga ya sea el que salva el Arroyo de Valle Madera, el que salva el Arroyo de Los Pozos o el que podríamos considerar primer puente de fábrica de este río, ubicado también en Arbas del Puerto a pocos metros de su conjunción con el citado arroyo de Los Pozos.

Características actuales de la obra. Por lo que respecta al genuino puente podemos decir que era una obra plena de fábrica a base de roca caliza ferruginosa bien despiezada en excelente sillería de larga soga, escuadría, disposición casi en seco con hiladas plenamente horizontales, solapamiento en esquinas para su mejor trabazón y fuertes estribos con gruesos muros de contención que evitarían daños en la estructura por las violentas crecidas que lleva este cauce en momentos de deshielos rápidos y lluvias copiosas en estas faldas de Pajares. Existía un largo encauzamiento a base de manguardias de mampostería tanto en aguas arriba como en abajo aunque ahora quedan solo testigos en el lado muriente del puentecillo.

También ha sufrido modificaciones su tablero; originariamente tenía aproximadamente 11 metros de longitud y recogía el cauce de modo esviado con respecto a la perpendicular del cauce existiendo una pronunciada curva en el camino, insignificante para el tránsito lento de caballerías y carros pero más peligroso para los vehículos a motor que empezaron a cruzar por él desde principios del siglo XX. Para suavizar el giro de entrada y salida por cabeceras se procede al ensanche por medio de tornapuntas de hormigón armado y losas del mismo material de plano triangular engarzadas a los tímpanos y estribos del puente, actuación que perjudicó bastante la impronta original de esta obra civil. Esta actuación puede que se produjera en los años 50 del siglo XX. La anchura original del tablero era de 6 metros y con este apaño se llega a los 9 metros de ancho que posee en la actualidad.

Dispone de un solo vano con bóveda en geometría de medio punto con luz aproximada de 7 metros por lo que entraría en la categoría de pontón carretero y como decía, la obra original es de una primorosa cantería que podríamos datar entre época clasicista y retoques decimonónicos hasta la extravagancia contemporánea que perjudicó este curioso pontón por ser renuentes a levantar otro como así se ha hecho recientemente aunque eso sí, demasiado pegado a la vetusta obra por lo que ambos se estorban y el pontón histórico pierde encanto y visibilidad. Destaca sobre todo el tono variado de la sillería, su volumen, con piezas que son prácticamente opus quadratum isódomo y prácticamente sin morteros, al mejor estilo de ingeniería romana. Algo parecido ocurre con su esbelta bóveda, plenamente regular conformando las roscas con dovelaje homogéneo y bien trabado con abundantes piezas que llegan al metro de soga y quizás, debido al buen trabajo original, aún permanece sólida pese a cierta humedades, musgos y eflorescencias, estas, probablemente por las reacciones químicas producidas por las filtraciones de los hormigones. También el trabajo de boquillas, especialmente la de aguas abajo que es más visible, presenta un trabajo del arte de montea peculiar pues si bien es cierto que no se logra -al menos en lo que ahora vemos salvo que haya existido una rehabilitación- el recurso exacto de montacaballo entre el dovelaje y la sillería de las hiladas que convergen con el arco, su aspecto decorativo es innegable. Originariamente dispuso de una completa y bien tallada imposta de caliza rosa con la incorporación de algunos imbornales de buena talla; subsiste el central en ambas caras con acentuadas curvas en su traza y queda perdido algún otro más sencillo en los muros o aletas de aguas abajo, producto de los deficientes arreglos del puentecillo tras la incorporación de la losa de hormigón. Esta horrible losa, precisamente, queda disminuida con tanto desconchón donde hasta se aprecia su endeble armadura en el mallazo de acero, con gran oxidación.

Debió de poseer buenos y lucidos pretiles de piedra tallada a base de sillería u ortostatos pero en alguna rehabilitación desaparecieron. Lo que queda actualmente y en consonancia con las defensas de parte del camino viejo son pretiles de mampostería con mucho mortero y albardillas convexas de cemento, en general, bastante completas salvo un lienzo que ha caído al río en zona de aguas arriba. El viejo firme de cascajo y arenas, repuesto más adelante con macadam queda subsumido bajo las actuales capas de asfalto que se debieron de ir reponiendo hasta los años 70 del siglo XX en que probablemente entró en funcionamiento el puente nuevo y que, ahora están rehabilitando.

Como ya indicaba, además de la obra del pontón, fue necesario canalizar en lo posible el cauce para lo que se refuerza la obra con pilastras sobresalientes junto a estribos con sillería semejante a la del resto de la fábrica y una larga continuación a base de mampostería variada en forma y volumen cuyos lienzos, especialmente en aguas abajo, subsisten en su totalidad pese a algún desprendimiento puntual. En lado aguas arriba, el desvió de la trayectoria del camino así como el levantamiento de la obra nueva han desvirtuado estas manguardias.

Dado que el puente nuevo cubre las necesidades de tráficos de esta nacional, salvo que existan otras servidumbres de paso que afecten al vetusto pontón, sería conveniente una actuación en la vieja obra para restituirla a su estado original y exhibirla como un hito pontonero histórico de lo que fue el antiguo camino real hacia Asturias. Como parece que existe espacio para crear algún aparcamiento o zona de descanso anejo al puente, pues se debería de llevar a efecto esa iniciativa para que el viajero, turista o curioso pudiera aparcar su vehículo en la zona, descansar y visitar esta vieja gloría del histórico camino. Hasta donde yo conozco y en el tramo leonés de esta mítica vía no existe ningún cartel o señal de tráfico que advierta al conductor (turista, viajero, curiosos o estudioso del tema) que se encuentra o va a cruzar uno de sus puentes históricos y grosso modo, puedo calcular que existen aproximadamente una treintena de obras civiles carreteriles de cierto interés histórico que ya deberían formar parte del catálogo de patrimonio lineal de esta calzada nacional en territorio leonés.

























































Tanda de fotos de fecha 13.09.2021 del puente en secuencia desde aguas arriba, aguas abajo, tablero, camino viejo carretero y ruinas de edificaciones anejas. 

PUENTE NUEVO DE LA N-630 PK 89












Tanda de fotos de fecha 13.09.2021

FLORA Y FAUNA JUNTO AL PUENTE VIEJO




Cólquico o Azafrán bastardo (Colchicum multiflorum Brot. Liliaceae)





Cardo de monte o Cardo verde (Carduus nigrescens Vill. subsp. nigrescens. Compositae)





Trébol dulce o de olor, Meliloto (Melilotus officinalis (L.) Pall. Leguminosae). Arbusto muy deteriorado por el ramoneo sobre los tallos altos. 





Cuernecillo, Trébol amarillo o Corona de Rey (Lotus corniculatus L. subsp. corniculatus. Leguminosae).



Saltamontes verde o común también llamado Langosta verde (Tettigonia viridissima (Linnaeus, 1758). Tettigonidae).









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