BAHILLO. Palencia
P-242 PK 9,300 y P-240 PK 8
Como ya explicábamos en la entrada para el Puente de Villalcázar de Sirga este puente de Bahillo entraría en la propia evolución en cuanto a costes bajos y
eficiencia para la construcción de obras pontoneras. Hacia finales del siglo
XIX dejan de levantarse en sillería y muchos de ellos se cubren con mampostería
y ladrillo incluyendo detalles en piedra de buena labra hasta que a principios del
siglo XX y siguiendo la propia traza o impronta de los anteriores se empiezan a
levantar con hormigones en masa, algunos con placajes también en sillería y
mampostería y pocos años después con hormigones armados. En general y
especialmente en el medio urbano estos puentes de hormigón armado se seguían chapando
en piedra para mejorar su estética. En pocos casos se dejaba la obra civil con
su cara vista de hormigón y quizás, esa es la rareza de este puente de Bahillo o el de Calahorra de Boedo, prácticamente idéntico a éste aunque con 4 vanos y mejor conservado. Otros ejemplos cercanos con chapados en sillería, ladrillo y/o mixtos pero de la misma impronta son los
puentes de Gozón de Ucieza, Villovieco o Frechilla.
Tampoco aparecen rastros de redondos o ferralla que nos
indique que tiene dentro una armadura de hierro o acero por lo que deberemos de
interpretar que es una estructura plenamente construida en hormigón en masa
aunque eligiendo un canto rodado muy uniforme de tamaño medio que se mezcla con
cementos y otros áridos. En todo caso, para tapar las irregularidad y marcas de
las cerchas se procedió a un enlucido con mortero de cemento. En bóvedas
también se aprecia que estas se componen de dos secciones según muestran las
marcas de la cimbra utilizada.
Otro aspecto llamativo es que se siguen construyendo puentes
a imagen y semejanza de los anteriores en piedra de época decimonónica con la
dificultad que entrañaba modelar bóvedas, pilas, estribos y hasta impostas
aunque eso sí, con materiales sensiblemente más baratos. En la propia evolución
ingenieril para puentes, el asunto se resolverá con presupuestos aún más
reducidos así como tiempos de trabajo más cortos al sustituir bóvedas arqueadas
por vanos adintelados por medio de la incorporación de vigas armadas, donde uno
de los precursores fue el ingeniero José Eugenio Ribera Dutaste.
Sin otros datos sobre fuentes documentales, podríamos conjeturar
que esta obra sobre el río Ucieza pudo levantarse a finales del siglo XIX o principios del XX y
aunque no es un puente que destaque por su bella arquitectura sí deberemos de
tener en cuenta que es un raro ejemplo de la utilización del hormigón en toda
su extensión. En su enciclopedia económico-geográfica editada hacia el año 1845
por Pascual Madoz no se citan puentes en esta localidad pese al gran detalle
que se hace del pueblo, incluyendo vías de comunicación, por lo que parecería probable que el cauce se salvara
por algún vado más o menos natural (tomo III, página 301),
Se encuentra bastante degradado aunque resiste bien los
desconchones y golpes de sólidos en sus variadas avenidas a lo largo del tiempo.
Tiene bastantes humedades en intradós y pilas. Su longitud aproximada es de 27
metros y el ancho regular es de 6 metros. El tablero se apoya en estribos
perdidos empotrados en los taludes de cabeceras y dispone de dos pilas
intermedias del tipo tabique muy detalladas ya que disponen de
tajamares-espolones y hasta tejadillos semicónicos, como en cualquier otro
puente de fábrica. Dispone de 3 vanos escarzanos con luces semejantes de 8
metros. Pequeñas aletas en disminución que protegen los estribos. En cubierta
también perduran los gruesos pretiles de época, en este caso de hormigón,
imitando los de tiempos anteriores en piedra.
Permite una circulación cruzada y no existen señales
limitando la MMA de los vehículos para su paso. Se debería rehabilitar plenamente,
primero con potente limpieza de lo visible del hormigón, consolidación del
mismo y un nuevo revoque de mortero que hasta podría tener un tono más
llamativo o alegre que acentuaría la propia geometría de la obra y su contraste
con el entorno natural.
Paseo o chopera junto al cauce del río que podría ser interesante pero que presenta gran degradación al convertir las orillas en escombreras.
No hay comentarios:
Publicar un comentario